Medicina Tradicional, definiciones
Definición: La Medicina Tradicional1
es la suma total de conocimientos, técnicas y procedimientos basados en
las teorías, las creencias y las experiencias indígenas de diferentes
culturas, sean o no explicables, utilizados para el mantenimiento de la
salud, así como para la prevención, el diagnóstico, la mejora o el
tratamiento de enfermedades físicas y mentales. En algunos países se
utilizan indistintamente los términos medicina
complementaria/alternativa/no convencional y medicina tradicional.
La
Medicina Tradicional es un tema supremamente diverso dentro del
contexto multicultural del Estado Plurinacional de Bolivia. Debido a que
cada Pueblo Indígena, y no olvidemos que oficialmente son 36 en el
país, contiene su propio concepto de salud y enfermedad, nos vemos ante
una amplia gama de Medicinas Tradicionales.
La
Constitución Política del Estado establece que tanto el patrimonio
cultural como el conocimiento de los Pueblos Indígenas deben ser
respetados y protegidos (Artículo 98,99 y 100 de la Sección III de
Culturas de la CPE). Esto implica una aproximación particular desde el
punto de vista de la salud. En Bolivia existen 36 grupos indígenas
oficiales, cada uno con una cultura y una cosmovisión específica lo cual
significa que también existen 36 conceptos de lo que es salud y enfermedad. Si bien el concepto del Vivir Bien ya
nos exige un replanteamiento del concepto occidental de desarrollo, no
está exento de tener que replantearse también el concepto de medicina. Es por esto que la Medicina Tradicional cobra tan grande importancia dentro del contexto boliviano del Vivir Bien y de la salud.
La salud-enfermedad y su relación con la cosmovisión de la medicina2
Las
categorías de enfermedad observadas en las medicinas indígenas
bolivianas se diferencian de las de la biomedicina: la enfermedad es
percibida entre los indígenas como una ruptura en el orden natural o
social. Son las deidades – la Pachamama, Dios de la sociedad o un
individuo quienes causan el mal. Una persona se enferma porque ha
transgredido alguna norma establecida por la sociedad o las deidades de
la cosmovisión andina (o los espíritus del monte en el caso de los
guaraníes).
La tarea del “medico
tradicional” consiste en restablecer el equilibrio, tanto en el orden
social como en el religioso, y los rituales de curación están
estrechamente ligados al mundo religioso andino o guaraníes, que a
menudo se fusiona con el cristianismo.
Para
la medicina andina, la salud y la enfermedad provienen de la tierra, y
toda curación se deriva de las plantas que la tierra misma ofrece al
hombre. Para curar al enfermo el médico tradicional media entre las
deidades y la tierra, entre el mundo de los muertos y el de los vivos.
El cuerpo y el espíritu son parte de un sistema integral y armónico, de
manera que una disonancia en cualquiera de las partes cura la
enfermedad. La población indígena diferencia entre la enfermedad del
cuerpo y la enfermedad “espiritual”. Cada uno de estos tipos de
enfermedad se trata de manera distinta; sin embargo, se cree también que
la esfera espiritual puede afectar a la del cuerpo, y viceversa. Por
ejemplo, el hecho de “renegar” o enfadarse puede provocar una enfermedad
“espiritual” o agudizar una dolencia existente, y afecta sobre todo a
las madres que están preocupadas por sus hijos El primer paso para
enfrentar una dolencia es efectuar un diagnostico dentro del núcleo de
la familia.
Amplitud y uso creciente de la Medicina Tradicional3
La
Medicina Tradicional se utiliza ampliamente y es un sistema sanitario
que está creciendo rápidamente y de gran importancia económica. En
África hasta un 80% de la población utiliza la Medicina Tradicional para
ayudar a satisfacer sus necesidades sanitarias. En Asia y en
Latinoamérica, las poblaciones siguen utilizando la Medicina Tradicional
como resultado de circunstancias históricas y creencias culturales. En
China, la Medicina Tradicional contabiliza alrededor de un 40% de la
atención sanitaria. A las personas que practican la Medicina Tradicional
se les conoce por lo general como sanadores tradicionales, colocador de
huesos, herbolarios, etc. Las personas que practican la Medicina
Tradicional incluyen tanto practicantes de Medicina Tradicional y
profesionales de medicina alopática como a médicos, dentistas y
enfermeras que proporcionan terapias de MT/MCA a sus pacientes — es
decir, doctores médicos también utilizan la acupuntura para tratar a sus
pacientes. Mientras tanto, en muchos países desarrollados, la Medicina
Complementaria y Alternativa (MCA) se está haciendo cada vez más
popular. El porcentaje de población que utiliza la MCA al menos una vez
es de un 48% en Australia, un 70% en Canadá, un 42% en EE UU, un 38% en
Bélgica y un 75% en Francia.
En
muchos lugares del mundo el gasto en MT/ MCA no es sólo importante, sino
que está creciendo rápidamente. En Malasia, se estima se gastan
anualmente 500 millones de dólares estadounidenses en este tipo de
cuidado de la salud, comparado con unos 300 millones de dólares
estadounidenses en medicina alopática. En EE UU, el gasto total en 1997
en MCA se estima fue de 2700 millones de dólares estadounidenses. En
Australia, Canadá y el Reino Unido el gasto anual en MCA se estima en 80
millones, 2400 millones y 2300 millones de dólares estadounidenses
respectivamente. ¿Por qué un uso tan amplio? Accesible y asequible en
los países en vías de desarrollo En los países en vías de desarrollo, el
amplio uso de la Medicina Tradicional se atribuye a su accesibilidad y
asequibilidad. En Uganda, por ejemplo, la proporción de personas que
practican la Medicina Tradicional frente a la población es de 1:200 y
1:499. Esto contrasta drásticamente con la disponibilidad de personas
que practican la medicina alopática, para la cual la proporción es de
1:20.000 o menos. Incluso la distribución de dicho personal es desigual,
la mayor parte se encuentran en ciudades u otras zonas urbanas y por lo
tanto es difícil que las poblaciones rurales tengan acceso. La Medicina
Tradicional es a veces la única fuente asequible de atención sanitaria,
especialmente para los pacientes más pobres del mundo. En Ghana, Kenia y
Malí, la investigación ha demostrado que una serie de medicamentos
antimaláricos de pirimetamina/ sulfadoxina puede costar mucho dinero. El
gasto sanitario per cápita en Ghana y Kenia contabiliza tan sólo 6
dólares estadounidenses al año. Por el contrario, la medicina con
hierbas para el tratamiento de la malaria es considerablemente más
barato y muchas veces incluso se paga en especias y/o de acuerdo con la
“riqueza” del cliente. La Medicina Tradicional es también muy popular en
muchos países en vías de desarrollo puesto que está firmemente
arraigada en los sistemas de creencias.
Es
factor común dentro de las Medicinas Tradicionales comprender las
enfermedades del cuerpo en conexión con enfermedades de la mente y
problemas del entorno.
'Existe
riqueza de conocimientos de los médicos locales tanto en los Andes como
en la Amazonía y el reto es reconocer y valorar formas distintas de
conocimientos y saberes en el campo de la salud, e incorporarlos de
manera gradual a los sistemas de salud 'oficiales'. Porque existe una
concepción distinta de la salud entre la población indigena, y la
comprensión de la enfermedad no se basa únicamente en patologías o
aspectos biológicos que denoten algún desequilibrio, sino que considera
otros factores de ordens social, ambiental y espiritual que también
inciden en el padecimiento.'4
Desde
el punto de vista occidental se comprendería esta dialéctica entre
cuerpo y mente de la siguiente manera. El cuerpo humano es un sistema
perfecto y, salvo la vejez como factor natural de la muerte, las
enfermedades provienen de agentes externos. Estos agentes externos en la
Medicina Natural se comprenden como desbalances de la dinámica natural
del cuerpo. Hasta este punto la cuestión no varía significativamente de
la Medicina Occidental pero es cuando se toma en cuenta la importancia
de la mente dentro de la enfermedad que la Medicina Tradicional toma
otro giro.
La Medicina Occidental
trata los síntomas de las enfermedades con medicamentos eficaces
haciendo énfasis en la enfermedad física ya que es inminente y la
amenaza de muerte, inmediata. La Medicina Tradicional, aunque tiene
repertorios de medicamentos de origen herbal y animal, se centra también
en los hábitos del enfermo. Los hábitos del paciente son algo que desde la Medicina Occidental se busca corregir desde la Promoción de Salud, mostrando los correctos hábitos de vida para prevenir
la enfermedad. Promocionar la salud puede sugerir la corrección de los
hábitos, o crear buenos hábitos en las generaciones emergentes, pero en
individuos donde los malos hábitos se han cristalizado debido a que los
han tenido por mucho tiempo, se vuelve difícil combatir estas costumbres
con mensajes.
Los malos hábitos de
toda índole tales como los alimenticios o las adicciones, están
profundamente arraigados en la estructura psicológica del individuo.
Cualquier acción que se lleve a cabo prolongadamente deja de requerir
voluntad consciente y se convierte en un proceso automático el cual
puede ser un buen hábito o un mal hábito. Estos automatismos son creaciones naturales de la mente (y no solo la humana) para promover la adaptación a una situación recurrente5.
Lastimosamente esta adaptación no tiene siempre una connotación
positiva y cuando el acto repetitivo es dañino, en muchos casos puede
asimilarse hacia los procesos involuntarios de la mente, generando de
esta manera un automatismo de un mal hábito.
Cualquier
persona que haya sufrido enfermedades a causa de un mal hábito sabe lo
difícil que es acabar con estos hábitos automáticos de la mente, los
cuales con el tiempo se vuelven adicciones dentro del balance químico
del cuerpo. En la Medicina Occidental hay un amplio repertorio de
medicamentos para atacar los productos de estos automatismos dañinos
(los síntomas) pero difícilmente se trata el origen del problema que es
la mala costumbre arraigada en el inconsciente del individuo. El médico
le sugiere, y en casos es imperante con el paciente en cuanto a los
malos hábitos que debe dejar, pero se requiere más que una amonestación
para acabar con los automatismos del cerebro humano.
Es
aquí donde entra en juego el factor característico y único de la
Medicina Tradicional que es el proceso ritual. Los procesos rituales de
muchas Medicinas Tradicionales y Alternativas, si son llevados a cabo
correctamente- son los únicos que pueden, mediante la sugestión, afectar
directamente los procesos inconscientes del cerebro en donde se
encuentran arraigados los automatismos. Toda acción que se hace por
segunda naturaleza deja de ser hecha por la consciencia y se transforma
en un proceso inconsciente de manera que el inconsciente es el blanco de
los procesos rituales, los cuales con música y otros procesos de
sugestión afectan directamente estas zonas. Claro está que es
supremamente complicado saber qué tipo de sugestión ritual estimula cuál
parte del cerebro en donde se encuentra tal o cual automatismo
responsable de un mal hábito que a su vez causa una enfermedad, pero
precisamente ha sido este conocimiento el que los Pueblos Indígenas han
perfeccionado a través de los siglos.
Este
conocimiento debe ser protegido y estimulado para que los rituales que
desde siglos atrás han sido capaces de corregir los automatismos de
malos hábitos (los cuales en occidente son responsables de muchas
enfermedades) no pasen a ser solamente rituales de índole cultural y de
identidad. Es necesario salvar la esencia de este aspecto de la Medicina
Tradicional así como las plantas y animales que usan para apoyar estos
procesos.
Conceptos Básicos sobre Medicina Tradicional5
Las
definiciones pueden diferir de las que figuran en las reglamentaciones
de los países donde se utiliza la medicina tradicional, por lo que deben
servir exclusivamente como referencia.
Hierbas
Las
hierbas comprenden materiales vegetales brutos, tales como hojas,
flores, frutos, semillas, tallos, madera, corteza, raíces, rizomas y
otras partes de plantas, enteras, fragmentadas o pulverizadas.
Materiales herbarios
Los
materiales herbarios comprenden, además de hierbas, jugos frescos,
gomas, esencias estabilizadas, aceites esenciales, resinas y polvos
secos de hierbas. En algunos países, se pueden elaborar dichos
materiales mediante diversos procedimientos locales, como el tratamiento
con vapor, el tostado o el rehogado con miel, bebidas alcohólicas u
otros materiales.
Preparaciones herbarias
Las
preparaciones herbarias son la base de los productos herbarios acabados
y pueden componerse de materiales herbarios triturados o pulverizados, o
extractos, tinturas y aceites grasos de materiales herbarios. Se
producen por extracción, fraccionamiento, purificación, concentración y
otros procesos biológicos o físicos. También comprenden preparaciones
obtenidas macerando o calentando materiales herbarios en bebidas
alcohólicas o miel o en otros materiales.
Productos herbarios acabados
Los
productos herbarios acabados se componen de preparaciones herbarias
hechas a partir de una o más hierbas. Si se utiliza más de una hierba,
se puede utilizar también la expresión «mezcla de productos herbarios».
Los productos herbarios acabados y las mezclas de productos herbarios
pueden contener excipientes además de los principios activos. Sin
embargo, no se consideran herbarios los productos acabados o en forma de
mezcla a los que se hayan añadido sustancias activas químicamente
definidas, incluidos compuestos sintéticos o constituyentes aislados de
materiales herbarios.
Utilización tradicional de medicamentos herbarios
Los
medicamentos herbarios comprenden hierbas, materiales herbarios,
prepara-ciones herbarias y productos herbarios acabados que contienen
como principios ac-tivos partes de plantas, otros materiales vegetales o
combinaciones. Por utilización tradicional de los medicamentos
herbarios se entiende un empleo prolongado en el tiempo. Su uso está
bien establecido y ampliamente reconocido como inocuo y efi-caz y puede
ser aceptado por las autoridades nacionales.
Actividad terapéutica
La
actividad terapéutica se refiere a la prevención, el diagnóstico y el
tratamiento satisfactorios de enfermedades físicas y mentales, el alivio
de los síntomas de las en-fermedades y la modificación o regulación
beneficiosa del estado físico y mental del organismo.
Principios activos
Los
principios activos son los ingredientes de los medicamentos herbarios
que tie-nen actividad terapéutica. En el caso de los medicamentos
herbarios cuyos princi-pios activos hayan sido identificados, se debe
normalizar su preparación, si se dis-pone de métodos analíticos
adecuados, para que contengan una cantidad determi-nada de ellos. En los
casos en que no se puedan identificar los principios activos, se puede
considerar que todo el medicamento herbario es un solo principio activo.
Nota extraída de: pueblosindigenas.bvsp.org.bo
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1 Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud. Pautas generales para las metodologías de investigación y evaluación de la medicina tradicional. Ginebra, OPS/OMS, 2002. Disponible en: http://www.ops.org.bo/textocompleto/pi31763.pdf
2 Escobar
Alcón, Lucio. Coordinador Nacional de la Dirección General de Medicina
Tradicional e Interculturalidad del Ministerio de Salud de Bolivia.
Investigador de la Cultura Andina. Salud e Interculturalidad en Bolivia.
3Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud. Estrategia de la OMS sobre Medicina Tradicional 2002-2005. Ginebra:OPS/OMS; 2002. Disponible en: http://www.ops.org.bo/textocompleto/pi31676.pdf
4 Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud: Una visión de salud intercultural para los pueblos indígenas de las Américas. Washington D.C: OPS/OMS; p. 35
5 Organización Panamericana de la Salud: Oficina Regional de la Organización Mundial. Pautas generales para las metodologías de investigación y evaluación de la medicina tradicional. Ginebra:OPS/OMS; 2002. Disponible en: http://www.ops.org.bo/textocompleto/pi31763.pdf
Comentarios
Publicar un comentario